No es la primera vez que me adentro en la investigación antropológica, pues ya os demostré en su día que el animal con el periodo de gestación más largo no es el elefante africano si no el bichohead (pincha AQUÍ sivesquetal), pero luego lo oiréis en un documental de la 2 durante ese duermevela tan placentero y único que siempre producen y creeréis que lo habréis soñado. Pero que conste en acta que esta vuestra RubiaK lo detectó antes.
Se está produciendo un fenómeno que, si no lo paramos antes, amenaza con acabar con una especie que lleva 150 millones de años habitando la Tierra. El actual descenso del número del Divinis Cantorum (conocido por el vulgo por "el cantante de banda") es un ejemplo de la mayor extinción de una población de animales vista desde hace muchos años. Su desaparición es casi tan rápida como la extinción del bisonte en América del Norte en el siglo XIX.
Se está produciendo un fenómeno que, si no lo paramos antes, amenaza con acabar con una especie que lleva 150 millones de años habitando la Tierra. El actual descenso del número del Divinis Cantorum (conocido por el vulgo por "el cantante de banda") es un ejemplo de la mayor extinción de una población de animales vista desde hace muchos años. Su desaparición es casi tan rápida como la extinción del bisonte en América del Norte en el siglo XIX.
¿Y qué o quién es el responsable de tamaño desastre musi-ecológico? Pues aquí estoy yo para daros mis primeras reflexiones, aunque está claro que este singular fenómeno merece un estudio de campo mucho más pausado y en profundidad. Os dejo por tanto, investigadores españoles todos que tenéis que salir más allá de nuestras fronteras para que alguien reconozca vuestra valía, un tema candente para vuestra próxima tesis doctoral.
A parte de su propio egocentrismo que es la mejor arma de autodestrucción masiva con la que cuentan, está demostrado que su abusiva exposición a la luz de los focos les está reduciendo al mismo ritmo que la capa de hielo del océano Ártico, la cual, como bien sabéis, se derrite a un promedio de un 9% cada diez años.
Otro factor determinante lo descubrí ayer en la Sala Wurlitzer y es la acción depredadora de los PHONOCAPTORS y su surf oscuro. Su Safari mutante a modo de banda sonora de una película imaginaria (que en algunos momentos me recordó a la sintonía de la Familia Adams, todo hay que decirlo) está haciendo mucha pupita. Aunque ayer su caja nos sonase un poco a lalataquememata, en sus sugerentes melodías no se echó en falta ningún cantamañanas que las enranciara con sus gorgoritos. Yestoesasí
Pero los que de verdad confirmaron la peor de mis sospechas, además de mis amados Toundra (que, por cierto, me acabo de enterar que acaban de fichar para Century Media / Superball) a los que venero, fueron unos holandeses errantes recién llegaditos de la Luna: RADAR MEN FROM THE MOON. Con su CD Echo Forever recién salidico del horno, hicieron anoche las delicias de los amantes de las melenas al viento, como es mi caso. Gracias a temazos como Dance of black and white paint, aprendí lo que es un paradidle-didle. Por favor que alguien, aparte de SantoGoogleBendito, me confirme que se trata efectivamente de un rudimento de percusión. De lo contrario pensaré que alguien me hizo anoche proposiciones deshonestas y ¡¡¡oh my god¡¡¡ las desaproveché.
Finalmente asimismo percibí, en este hábitat tan natural que es un Lunes 5 de agosto en un desértico -ergo stoner- Madrid que, además del "Rodríguez Hipster", se dieron cita en este mi observatorio animal, otras especies en extinción como el gambiterus musicalis festivalerum, siendo dos de sus máximos exponentes, mis queridos D. Merio de Peyote Producciones (a la sazón organizador del evento y al que por lo tanto, amo) y D. Raúl, más conocido como Mr Virus con los que, aleluyagloriadiox, pude departir un ratejo, entre otros temas de gran calado social, sobre lo casposos que pueden llegar a ser algunos pretendidos nuevos templos del rock de la capital.
Vamos, enresumiendo, para los que nunca me entendéis cuando escribo y que, aún así, os empeñáis en seguir intentando pergeñar qué es lo que pretendo transmitir en mis descerebradas rubicrónicas: atención chavalada, últimamente no solo a veces veo, además de muertos, bandas en las que se ha prescindido de las estrellitas del oriente por antonomasia que son los cantantes, si no que hasta me gustan y mucho. Así que, o espabiláis u os vais a quedar sin focos bajo lo cuales resplandecer y refulgir. Nosdigonáysolodigotó.