NOCTURNOS (IM)PERFECTOS. SALA CARACOL. 25 DE SEPTIEMBRE DE 2010

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Ayer 5 de octubre, tras 7 años de ansiosa espera, los madrileños pudimos disfrutar por fin, en una noche rabiosamente juvenil, de un nuevo directo de los Placebo. Brian Molko y su nuevo batería-letrista dieron el todo a pesar de hacerlo en la Plaza de Toros de Vistalegre más conocida como "Lalatamemata". Melodías de ayer y de hoy sonaron (como pudieron) en una auténtica batalla por robarle al sol sus últimos rayitos (una de su mejores canciones en el disco homónimo).

Ah no. Pero que tontísma estoy... si los muy kapronesss cancelaron dos días antes el concierto. ¿Se le habría acabado el eyeliner al Molko?. Pues ná, me tendré que seguir conformando con oírles a todo trapo en el metro y con la sensación de que una ya los ha visto antes, aunque sin ser consciente de ello. Y no por la ingesta de alcohol de ese día (que también podría ser) si no por propio desconocimiento y obnubilación hacia el personaje al que telonearon haya por el 95 (¿dónde estabas tú?): su majestad el Duque Blanco (Una cosica: pero ¿se ha muerto o no?). Al menos me queda la entrada de tan mítico concierto (creo que era el Outside Tour pero bien podría ser Yaquiénleimporta Tour).  Pues ná. A otra cosa mariposa.

No me canso de decirlo, oiga: las salas de música en vivo se están subiendo a ¿usted sabe lo que es la parra? Pues ochomil pisos más pa'rriba. Y porqué arremeto otra vez contra las pobres (de espíritu, obvio) salas. Pues hete aquí otra nueva prueba de lo abusivas de sus cláusulas (me río yo de las de Timofónica). Otra vez los amigos y familiares de cuatro bandas de rigor llenamos la Sala Caracol y nos dejamos los lueritos en copazos (aunque confieso, a mucha honra, que a modo de protesta silenciosa me llevé la petaca y rellené los cocacolos pa' no hacerles demasiado ricos). Exigen venta mínima de entradas y se reservan el derecho a cancelar el concierto si no les interesa. Te cobran hasta por el catering y por montarte un chiringuito para vender tu merchandising. Virgendelamorjermoso. Y como siempre, al final, los músicos vieron cuatro euros. Parafraseando a ese gran filósofo de los 80, mi querido y nunca bien ponderado Calimero, pienso deque: Es una injusticia ¿no créeis amiguitos?

Principalmente este mi aplauso va por esa primera fila cambiante de cada uno de los chouws. Allí estuvo lo más granao y entregao de lo que viene siendo el fenómeno fanchi-unamigoparasiempre.

Empezaron The Blackliners http://www.myspace.com/theblackliners. Me dejaron pasmá con la versión arrimarlacebolleta del
Obersipbop. ¿Qué qué canción en esa? El "You're the one that I want (yurealeombo ujujú, janei)" que inmortalizaran en sus pantalones bien pretos (de esos pitillomarcandopaquetillo que vuelven a estar de moda) el Travolta y la Newton-John. Tremenda versión.

Continuaron Chicolisto http://www.myspace.com/unchicolisto. He de confesar que durante su actuación estuve más pendiente de rellenar el cocacolo con mi petaca. Ellos mismos describen su música como Canción popular melodramática. Ahí es nada. De lo que estoy segura es que más de uno de los componentes se llama David, Javi y/o Alberto (al menos en los Alcatraces esto pasa siempre). Y se atreven a pregonar a los cuatro vientos que "No estoy en Facebook". Ole.

Y fue después cuando saltaron Nocturnos http://www.myspace.com/losnocturnos al escenario. Sobra decir que son los que más me gustaron. Principalmente porque os iréis dando cuenta que no soy nada objetiva en mis críticas. Joer, pa' eso hago mi blog. Pa' decir lo que me sale del funky. Si no estáis de acuerdo con lo que pienso, pues opináis más abajo, os abrís otro blog u os peináis patrás. Pero es que Monti siempre transmite un buen rollo increíble -aunque se haya cortado el pelo... Y David (¿lo veis como siempre hay un
David?) si no digo algo bueno luego no me invita en el Tiki (bueno, la verdad es que tengo especial debilidad por los bateristas). Si digo algo bueno de Víctor sonaría fútil (pa' que luego no digáis que no tengo recursos lingüísticos) pues bien sé que no le caigo bien desde el día que le dije que no soporto al Bumbury porque va de Jim Morrison del Moncayo venido a más. Y a Alberto (¿lo veis como siempre hay un Alberto?) no tengo el gusto. Aunque los fanchis prefirieron canciones como Adiós creo que estuvieron especialmente muy propias la versión de los Clash de Perdido en el super (letra paraconlacual me siento muy identificada) y el Porqué te vas (no diré de quién para evitar prejuicios tontos).

Cerraron la noche The Paff...Boom's http://www.myspace.com/thepaffbooms. Lograron captar mi atención con el A town callled Malice de los Jam y terminaron con mis queridísmos Ramones pero en el entretanto hubo demasiado cassio y demasiado wakawakawaka muy digno todo ello de un episodio de Starky y Hutch (y ya no digo más nada que me delata la edad).
Mira, Rubia, es la tercera vez que escribo el comentario en tu blog y a la hora de publicarlo se borra.
Asi que voy a resumir que estoy harto de escribir : Los empresarios de salas de musica en directo tenemos un negocio y, naturalmente, esperamos rentabilizarlo y esto no se consigue sólo con la presencia de madres y novias que vienen a ver como su retoño y/o churri es estrella por un dia.
Los grupos que tocan en estas salas podian haber elegido comprar espacios en TV o radio, pero sale un poquito mas caro, claro.
Rubia, la música no tiene precio. Para todo lo demas...
Mireusté Querídisisisimo Mr. Sting (miprimerbloggerochispasquémoción),

Primero le pediría que dado que, que yo sepa, no nos han presentado,se dirigiera a mí por mi nombre completo: Sra. LaRubia. Un respeto, porfavorrrr.

En segundo lugar le diría (y de hecho se lo voy a decir) que el problema es justamente el contrario: LA MUSICA, como que tu hijo se pierda la final de la champions league, NO TIENE PRECIO y empresarios sin escrúpulos esclavos del kapital quieren ponérselo lo más alto posible para forrarse atutiplén. Le pasa igual al agricultor: todo un año currando de sol a sol para sacar unos céntimos por un kilo de tomates que en el carreful nos venderán por casi cuatro leurazos (pero Sra. ¿a visto usté a cómo están los tomates?, ande vamos a llegar). Y entre medias el personal se va forrando.

Seguro que usted es de los que paga (eso sí, siempre en B y sin dar de alta en la Seguridad Social)a los camareros, al DJ, al técnico de sonido, hasta incluso al puertas que nos perdona la vida cada vez que nos deja pasar en su local. ¿Por qué no paga usted a los músicos que se lo curran durante todo el año, amenizan el local y se traen siempre a un grupo de amigos y groupies (madres y churris incluidas) que les gusta el alpiste fino y se dejan el jornal en su barra?. 200, 300 leurillos mínimos (50/60 leuritos para cada chaval) no estaría mal ¿no?. A veces interesa. El negocio está ahí, en lo que arriesgas pero puedes retornar con creces. Hay Salas que lo hacen y les funciona.

Bueno, Mr Sting, sin acritud: por favor siga usted aguijoneándome cuando quiera que como ve, me gusta y me crezco.