Ayer me salió el José Luis López Vázquez que todos llevamos dentro, forjado a base de soporíferas películas de cuando dormitar al son de los setenteros parapapá era el sábado nuestro de cada semana y me dije ¡¡¡¡A por los suecos¡¡¡¡ imitando ese inimitable tonito del más ibérico y bigotudo de nuestros machos. Porque a eso se reducía todo: vienen unos suecos que en los diez años de su existencia no han pisado nuestras venerables tierras y que son conocidos por cuatro gatunos y hemos de acudir todos en tropel a adorar al extranjero. Menos mal que contábamos también con dos buenísimas muestras de profetas en su tierra a modo de teloneros. Efectivamenteysí, el trío de ases que se marcó
PEYOTE PRODUCCIONES funcionó, como no podía ser de otra manera, a las mil maravillas. Venga ese primer aplauso para Merio Perio, gambitero fino donde los haya.
MR. WILFRED, muchachada rockera por todos sus juveniles poros, abrieron el planetario evento con sus guitarras blackcroweras (ya no sé qué etiquetitas inventarme) aunque les faltó una de ellas por motivos técnicos de última hora, pese a lo cual, nos interpretaron igual y muy francamente seis temitas de su
SUPER OCTOPUS, destacando los limpios y acertados riffs de Pablo que espero suenen todavía mejor con esa púa guapa que le regalé. El timbre de Ale, según me soplaban los apuntadores (me crecen los colaboradores como enanos en el circo), en ocasiones muy cercano al más guaperas de los Incubus, D. Brandon Boyd, gustó a la concurrencia, no así esos sus guantes demodés (¡¡¡¡Quítatelos pordiox¡¡¡¡¡). Muy colegas de sus colegas, llamaron a Mario, el guitarra que se quedó sin tocar, para que al menos se cantase a pachas su DON'T LET ME DOWN. Emotivo momento "Solo no puedes, con amigos, sí".
Y le tocó el turno al power trío más profeta de todas sus tierras, nada más y nada menos que mis venerados
DIEAWAY (os suenan ya ¿que no?). Porque mucho sueco, mucho sueco pero ¿qué hay de estas joyitas pregonando en el desierto?. Afortunadamente quedan mentes preclaras con cultura y conocimiento musical (algo que, by the way, también nos quiere arrebatar, más si cabe, nuestro querido y nunca bien ponderado Ministro Wert) que reconocen los diamantes que refulgen entre circonitas como un tal Pimiento Simone que esta misma mañana ha descrito así a estos mangurraines: "¿Se puede imaginar a unos Saint Vitus noventeros con Chris Cornell sustituyendo a Wino Weinrich? BORN TOO LATE, la historia se repite, y lo que sonó es el puto sueño húmedo de un doomster". Es más, una vez escuchado su
LEAK OF NOISE piensa que "El disco suena de puta madre, los músicos tocan como hellhounds, los temas son cojonudos, decenas de riffs imaginativos, espesos y negros como la noche, y David canta con el feeling y la potencia del Chris Cornell más rabioso. ¿Alguien pensó alguna vez en los Soundgarden de Badmotorfinger pero más progresivos y ultraoscuros? Pues bien, ya no hace falta.". Pues atención a navegantes: como mandan los cánones de una groupie de pro he podido escuchar en exclusiva (no me obliguéis a contaros bajo qué circunstancias) el material que están preparando para su inminente segundo trabajo de larga duración y puedo afirmar y afirmo que suenan más cavernícolas que nunca con un bajo Raúl style que lo vais a flipar en colorines, mis amiguines.
Mencionar también que durante el mini concierto de estos chavales (solo nos tocaron cinco temas) me vi identificada con las mujeres de los toreros que no van a la plaza para no sufrir. Yo me tuve que refugiar en la barra para no presenciar los sufrimientos de un baterista con un bombo y una caja a la fuga. Menos mal que, a diferencia de aquél, el artista no asesinó al final al objeto de su sufrimiento. Claro que no fue por falta de ganas si no porque, en este caso, los suecorros le hubieran corrido a gorrazos y puedo asegurar que la del cantante era bien grande. Hablo de la gorra, obvio.
Qué feos son los
JEREMY IRONS & THE RATGANG MALIBUS para ser suecos, cagüentó. Luego me llevaré nuevamente cogotones por ser tan banal, frívola y sin sustancia, pero repito, ¡¡¡¡qué feunos, por los clavos de kristgod¡¡¡¡. No como sus guitarras, todo sea dicho. Qué límpidas, cristalinas y sincopadas. Muy nórdicas en definitiva pero para mí, demasiados medios tiempos que a su vez eran demasiado largos y lo que viene siendo cansinos. Yo soy más de que me toquen ahora rinkirinki y de repente que me toquen ¡¡¡¡hala, al 11¡¡¡¡ y volver a que lo hagan despacico para pasar a destrozar el ampli. Y así. Hubo un conato de algarabía cuando el cantante se sacó esa Gibson especial en lugar de la ñona telecaster de los videos del youtube pero fue un puro espejismo.........Efectivamente y también, un concierto muy bonito, una ejecución cuasi perfecta pero el horchatismo pudo conmigo.
A ver si alguien le dice a estos vikingos que, al igual que los guantes sin dedos del cantante de Mr. Wilfred, eso de los indios ya no se lleva. Pero ellos insisten en el temita al describir lo que representa el título del álbum que ahora están presentando por tierras ibéricas:
"According
to ancient lore, and cult of the antediluvian pagan deity, Ginsu the
Magnificently Pointy, a SPIRIT KNIFE consists of a bone blade bonded to the
souls of the Mud People. He or she that defended oneself or took the life of an
enemy with the SPIRIT KNIFE became magically bonded to the blade and, thus, the
only person who could touch or wield it in future battle."
Cojonas, qué miedico, ahora entiendo por qué esa batería resulta indomable......¡¡¡¡SON LOS SPIRIT DRUMS¡¡¡¡.